Mujer auténtica
¿Cuándo comenzaste a manejar una cuenta pública en redes sociales?
Mi cuenta en Instagram siempre ha sido abierta pero mi perfil “público” creció cuando decidí traer la campaña internacional de “40 días por la vida” a mi ciudad. A partir de eso, me he convertido poco a poco en una activista provida.
Empecé a ser más auténtica cuando me di cuenta que no necesitaba ser perfecta para servir.
Al experimentar el poder del santo rosario y siendo fan del mismo, decidí un día crear una cuenta de oración, poner una cámara enfrente y rezar. ¡Perdí el miedo a vivir y a hacer lo que me gusta!
¿Qué te da la seguridad para mostrarte auténtica en tus redes y en tu vida normal?
Sé lo que hago y por qué lo hago, esa es mi guía para no tener miedo de hacer aquello que siento.
A los 14 años tuve un encuentro fuerte con la misericordia de Dios y mi corazón se fue moldeando para tener una mejor relación conmigo misma y así ser más amable con los demás. Definitivamente sentirme amada por Dios me da la fortaleza para amar a los demás.
¿Cómo no caer en el impulso de cambiar para agradar al resto?
Creo que algo que ayuda mucho es preguntarte qué te motiva. Entonces cuando la presión del grupo sea fuerte, puedas recordar quién eres, cuánto vales y cuánto tienes por aportar desde tu “yo” que es único. Hay que decir que esto es un proceso, ya que el deseo de pertenecer es parte del ser humano y no está mal, por ello debemos tener un balance.
Siempre que veo a otros jóvenes que tienen virtudes o creencias valiosas que “salen del molde” tengo ganas de gritarles que el mundo necesita tanto de eso que solo ellos tienen, que como decía el Beato Carlo Acutis “todos nacemos como originales pero muchos mueren como fotocopias”. Por favor ¡no tengan miedo!
¿Qué experiencias positivas has tenido al mostrarte auténtica con el resto?
Por un lado, las personas se sienten libres de ser ellas mismas conmigo y se acercan con más confianza a mostrarse como son. Por otro lado, he creado relaciones más honestas con los demás, donde ellos aprenden de mí y yo aprendo de ellos. En redes sociales esto también es contagioso, ya que la gente percibe de alguna forma lo genuino.
¿Cómo sobrellevas las críticas y los comentarios negativos que recibes en tus redes?
Esto no es algo fácil pero la clave es saber que los mensajes de odio o rechazo no son hacía mi sino hacia aquello que las personas sienten por la causa que defiendo. La instantaneidad de las redes sociales hacen que las personas no siempre tengan una respuesta premeditada, sino que aquello que dicen lo hagan desde la emoción del momento sin pensar en las consecuencias que tiene en el otro.
Frente a las críticas es importante que nos hagamos preguntas como: ¿quién es la persona que me hace esta crítica?, ¿la opinión de esta persona es valiosa para mi? ¿Es alguien a quién yo pediría consejo? También es útil recordar que aquello que nos dice el otro y como nos lo dice habla más de la persona que de mi.
Nosotros tenemos el poder para dejar que el comentario del otro nos afecte o no. Si reconocemos que el comentario viene del deseo genuino de aportar o corregir, tomamos la decisión de tomar y acoger aquello que más nos ayude.
¿Qué herramientas o consejos podrías dar a las mujeres que no se atreven a mostrarse como son por miedo al qué dirán?
Les diría: ¡Mujeres, son únicas! Tienen una capacidad gigante de aportar al mundo en el que vivimos desde su feminidad y unicidad! Creo que estamos en un tiempo donde podemos prender fuego al mundo entero, en palabras de Sta. Catalina de Siena, siendo la mejor versión de nosotras mismas y mostrando al mundo que la fuerza más grande está en el corazón.
Entre las herramientas clave para trabajar en esa autenticidad está el:
- conocerse a sí mismas
- regresar a ver su historia con compasión y abrazarla con sus altos y bajos
- identificar heridas
- plantear objetivos concretos
- ir a terapia
- pedir dirección espiritual
- desarrollar hábitos
- purificar los lugares personas y cosas que no aportan a la propia vida.
Un consejo importante es: no bajar los estándares de la vida que quieres, de la persona con la que quisieras compartir tu vida, de las metas, no hay que conformarnos con la mediocridad. Aunque el camino de la vida nos da muchas sorpresas, ser fiel a aquello que tu corazón anhela es vital para ser auténtico .
Kiara Villavicencio
Soy una hija amada de Dios, tengo 20 años y tengo el llamado de darme a los demás, desde el servicio y desde la autenticidad. Tengo un gran amor a la vida y a las causas que tengan fundamento en la defensa de la dignidad del ser humano.